¿Depresión o Melancolía?
¿Depresión o melancolía?
Por Laura Aviles Rodriguez
¿Sabías que estos dos términos suelen utilizarse como sinónimos? Incluso hay quienes afirman que es lo mismo.
La frecuente analogía entre melancolía y depresión se encuentra ya señalada por James Strachey en su nota introductoria a Duelo y melancolía escrito por Freud en 1915 y publicado dos años después.
Por lo que en ocasiones ambas se han tratado como equivalentes, lo cierto es que es lo mismo y por lo tanto no debería ser tratadas en un proceso psicoterapéutico de la misma manera.
La depresión y la melancolía comparten dos características: ambas son producto de la frustración y, por lo tanto, son desagradables, ambas son respuestas a las exigencias impuestas por la realidad
¿Pero, cómo diferenciarlas?
García nos explica de una manera muy sencilla la diferencia entre una y otra.
Aquí la explicación que nos brinda al respecto.
“El depresivo añora la soledad porque toda presencia le resulta inoportuna y molesta, por la demanda de respuesta que ella implica y por la vergüenza que él siente por su estado de impotencia. El depresivo se queja de su falta de valor y de ser incapaz de realizar lo que hacen los otros, pero no se acusa como el melancólico. El término “melancolía” designa la depresión psicótica, caracterizada por el delirio de autoacusación y la culpabilidad. A diferencia de lo que ocurre en el melancólico, el problema inconsciente del depresivo no se relaciona con el superyó sino con un ideal del yo que ya no es capaz de sostener la presencia del sujeto frente a los demás. El origen de la depresión se sitúa en esa región de la personalidad en la que confluyen el anhelo de potencia y la imagen de sí mismo.” (García, 2012)
Referencias
García, H. (2012). La depresión: etiología y tratamiento. Revista Ciencia y sociedad. XXXVII
S. Freud, “Duelo y melancolía”, Obras Completas, Tomo XIV, Amorrortu Editores, Buenos Aires, 1917.
